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20.10.14

El relato del crimen: intento de una explicación formal y su correlato social (2/5)

 4. El relato de investigación o la insuficiencia y el exceso del uso

El relato de investigación que lee huellas, indicios, que deduce y resuelve crímenes y enigmas se ha escrito desde siempre. Ya se ha mencionado El libro de Daniel y Zadig que decisivamente usa un razonamiento deductivo. Otro gran ejemplo es Edipo rey de Sófocles, que es tanto un relato de investigación como uno de crimen. La práctica de la investigación misma es tan antigua como los relatos que dan cuenta de ella, Carlo Ginzburg señalaba que ya los primeros cazadores en la los albores de la humanidad practicaban la actividad de leer huellas (de animales y hombres) y sacar conclusiones; que los críticos de arte en el siglo XIX observaban detalles menores como la forma de las orejas o las manos para determinar la autenticidad de una pintura; que Freud y la legión de psicoanalistas que lo siguieron, hasta ahora, intentan leer los actos fallidos, los síntomas, y deducir las operaciones del subconsciente. En todas estas actividades de investigación, de leer huellas y síntomas, el objetivo fundamental era y es obtener una respuesta (¿quién lo hizo?, ¿dónde está?, ¿cómo lo hizo?, etc.). Resolver el enigma, encontrar la presa, descubrir la autenticidad de la pintura, conocer la producción simbólica del subconsciente. Estas respuestas eran y son también el objetivo del relato de investigación.

¿Pero qué ocurre si ese objetivo deja de tener interés o se vuelve secundario?

23.2.14

La condición del escritor entre lo público y lo privado (con acento en 2666 de Bolaño)


1. Kafka-Brod

Entre Franz Kafka y Max Brod se escribió el relato de la condición pública y privada del escritor. Si entendemos que la sociedad moderna, como señala Hannah Arendt, se articula en la incorporación de las esferas pública y privada, con Kafka la literatura llega a ser un acto privado y el escritor abandona la sociedad definitivamente, cancelando incluso el sueño romántico de la torre de marfil. Pero en el intento de la borradura propia, le da a Brod, el amigo, la pauta para terminar el relato: el pedido de quemar todos sus manuscritos después de su muerte. Brod, en su ansiedad de buen amigo de Kafka y de la literatura, impide esta borradura y termina el relato publicando la obra entera de Kafka, que se convierte en la refundación del límite entre lo público y lo privado. Desde entonces, se situará en este límite la existencia de la literatura, y del mundo. Este relato dice que el escritor que es publicado (él único que puede efectivamente ser llamado escritor en la sociedad moderna), deberá estar siempre muerto. Ser un fantasma se convierte en la condición única y más verdadera del escritor. 
 

2. Arlt-Piglia